José Manuel Ramos es Jefe de Asistencia Técnica del Programa de apoyo a los Derechos Humanos y a la Democracia (ProDerechos), un programa financiado por la Unión Europea para incentivar una cultura de derechos humanos en Honduras.
Desde la perspectiva de José Manuel Ramos, el 2022 fue un año retador debido al rezago que dejó la pandemia, así como el proceso de transición de Gobierno a nivel nacional. Resalta el papel de ProDerechos al ser un programa que ha apoyado en ese proceso de transición, a través del fortalecimiento de las instituciones con sus planes estratégicos como el caso de la Secretaría de Derechos Humanos, CONADEH y CONAPREV, lo que ha ayudado a tener un norte claro, sobre las actividades de cada institución.
En el 2022, ProDerechos logró reimpulsar los diálogos multisectoriales en derechos humanos, “ProDerechos se consolidó como una entidad que convoca a diferentes sectores de la institucionalidad gubernamental, así como de la sociedad civil y el sector privado, generando importantes espacios de diálogo interinstitucional desde un enfoque de derechos humanos”, dijo.
Agrega que, gracias a esto, se pudieron estructurar diálogos alrededor de cinco mesas sobre temas estratégicos en el contexto nacional, como lo son: 1) la mesa de defensores/as de derechos humanos, tierra y territorio, 2) la mesa del Estado de Derecho e instituciones autónomas del sector justicia, 3) la mesa de corrupción y derechos humanos, 4) la mesa los DESCA, Empresas y DDHH, y 5) la mesa de política pública y plan nacional de acción en derechos humanos y sistema nacional de derechos humanos.
Otro de los avances, fue la realización de una Guía Metodológica de Entendimiento Común, para la aplicación del Enfoque Basado en Derechos Humanos, así como un Plan de Educación y DDHH para el uso de los beneficiarios del Programa y el público en general.
También se logró un mayor impulso desde la comunicación para el cambio de derechos humanos, a través de la realización de una campaña, así como la puesta en marcha de la página web, que es un reservorio de información para el intercambio.
Retos del 2023 materia de derechos humanos Para José Manuel, un reto importante para el país es la construcción e implementación de la nueva política pública en derechos humanos, así como las diferentes políticas sectoriales con enfoque de derechos humanos.
Un segundo reto, es el fortalecer el rol y autonomía de las instituciones operadoras de justicia. “En el contexto actual, el Ministerio Público y Poder Judicial son claves, debido al pronto relevo de autoridades como magistrados a la Corte Suprema de Justicia y Fiscalía. El combate a la impunidad de violaciones a derechos humanos pasa por el rol, la buena dirección y funcionamiento óptimo de estas instituciones”, aseveró.
Otro tema que destaca es la necesidad de la llegada de la CICIH como un apoyo al combate a la corrupción que impacta directamente la garantía de los derechos humanos. Señala, como un reto también, el poder lograr una mayor protección a los derechos de las personas defensoras de derechos humanos y el medio ambiente. Ha habido promisorios avances para la adhesión al acuerdo de Escazú.
Para continuar incentivando una cultura de derechos humanos, es primordial seguir fortaleciendo los mecanismos de diálogo, como se ha realizado en el pasado año. “Es importante seguir impulsando mecanismos de diálogo estructurado y no estructurado, con las víctimas, así con los titulares de derechos, conocer sus realidades, y que estos diálogos logren avances específicos, que exista una coparticipación entre todos los actores para generar compromisos en favor de los derechos humanos”, concluyó.
Apunta a no olvidar desde la perspectiva de derechos humanos, y recordar que los derechos económicos, sociales, culturales y ambientales (DESCA), es decir, el derecho al agua, la alimentación, la pobreza y la educación, deben permanecer en agenda porque son derechos muy necesarios en un país con un índice de pobreza del 74%.